Eva Gerlach nació en Holanda, en 1948. Publicó sus primeros poemas en la Revista Hollands Maandblad en 1977 y en el mismo año su libro titulado Verder geen leed. Poeta altamente disciplinada, utiliza la funcionalidad del ritmo y la densa construcción tanto en poemas individuales como también en sus libros. Hasta la publicación de su volumen In een bocht van de zee todos sus libros han sido construidos por secciones. Elementos anecdóticos e irónicos han ido creando gradualmente el espacio para apuntes más concisos exentos de cada fragmento de emoción reconocible y cada vez más abstractos.
Poemas de Eva Gerlach
La fuerza de la parálisis
Forse per forza già di parlasia
Si travolse così alcun del tutto;
Dante, Inferno, XX
La fuerza de la parálisis
Forse per forza già di parlasia
Si travolse così alcun del tutto;
Dante, Inferno, XX
Tú ibas en un sentido,
yo para ir a mi casa en el opuesto.
Dijiste algo, te volviste, yo también, pero una tromba
negra se llevó tu boca, tu voz hacia adentro y durante
muchas noches ya no pensé en ti
hasta que una cabeza contra el asfalto, todo gritos
a mi lado, muda, apoyada en mi hombro, y otra
más profunda e indefensa, en mi seno,
me tocó cantar y canté
"se ha roto la llave -"
Te vi, vi desde mi cabeza tus ojos en el espejo.
A nuestras espaldas, encogidos como versos que uno olvida
y se sacude del pelo al levantarse, los carriles. "Allí,"
dijiste, pupilas en seguida contraídas, y afuera, volcados,
esos dos, incrustados mutuamente hasta el volante.
Ciegos ante el peligro, tan tranquilos,
tan perdidos uno en otro, revolcados,
tan sin querer y sin intento de esquivarse,
tan decididos a enfrentarse cara a cara.
De kracht van verlamming ("La fuerza de la parálisis", 1988)
Resucitaron en mi hija los difuntos.
Aún tienen algo flojas las cabezas,
en mis brazos buscan a tientas un sostén
alzan la voz cuando oyen mis arrullos;
impulsados por el hambre hacia mi pecho, encuentran
puntos de apoyo para las manos, reconocerme
contrae sus pupilas mientras elevan
sus miradas ciegas de las fotos hacia mí.
Extraído de Dochter ("Hija", 1984)
De vuelta
En la casa más grande imaginable
vivimos en media ala con el miedo,
que se guarda la mejor habitación.
Entre espejos voy corriendo hacia un armario
de negrura que se abre con crujidos
y compruebo sin mirar en un suspiro
que allí cuelga: la bata de mi madre
en que mi cuerpo, hinchado, por fin cabe.
Me la pongo, me instalo en sus mentiras.
Somos una. No nos separaron nunca.
Extraído de Domicilie ("Domicilio", 1987)!
Que todas las cosas
'Sol qui illustras omnia solus'
(Bruno, Cantus Circaeus)
Qué fue aquello que dijiste, lo de los lucios
temprano en la mañana de invierno cuando la noche
envolvía a tu padre y a ti por separado
encima de la moto, que cada uno hacía su propio
agujero en el hielo y tú lanzabas no sé qué caña
tal o cual anzuelo, carnada diminuta
en una lata: nunca pescaste 1
solo lucio. Y no había también una lámpara,
que luego tuvimos nosotros, de esas de pie,
metal jaspeado, también podían colgarse.
Conservarlo todo, todas las cosas en la
memoria, lugar y fecha, sustancia, can-
tidad y calidad. Ser un dios
que lo mueva todo.
A veces veías a uno
quedarse quieto en el fondo, con esa cabeza
en punta que tienen, manchas grises.
Extraído de Wat zoekraakt ("Lo que se extravía", 1994)
Traducciones de Diego J. Puls
FESTIVAL INTERNACIONAL DE POESÍA DE MEDELLÍN
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HOMBRE VIVO
Camina pues hacia fuera, una mosca se posa en su lengua y
él la escupe, mira si aún vive, la deja secarse
en sus manos, toca con su bastón las ya amarillas
hojas de la morera una por una,
caen ante sus pies. Y el cuervo
no lo abandona.
Lo quieres, nunca más será el que camina ahí fuera,
acabas justo de verlo y sin embargo: nunca antes
tan perfectamente enmarcado en la luz, hombre
en vida, todo lo que sabes de él toca
todo lo que de él ves y él se halla en la curva
del signo de interrogación que es la morera
de pie casi translucido,
como tú lo ves, su cara
levantada, el triángulo bajo su barbilla, donde la garganta
es más vulnerable, la piel ahí
estirada – nunca de esta forma, excepto quizá
dentro de ti, lo has olvidado – lo quieres, golpeas
la ventana y él te ve, lanza desde su mano
la mosca y echa a volar.
De: Situaciones (Situaties), De Arbeiderspers, 2006
Traducción española: Eva Navarro 2009
KST
No puede tener forma y
no la tiene. Procura siempre
ser así pero no sabe
cómo. No hay nadie
que haya visto cómo es realmente. Pero
a veces en habitaciones llenas parece
quedarse quieto y conocerte, levantarse
hacia ti. Da. No digas nada,
haz un movimiento en dirección contraria
(como ahuyentando a un gato callejero)
y desaparece.
De Situaciones (Situaties), De Arbeiderspers, 2006
KST
No puede tener forma y
no la tiene. Procura siempre
ser así pero no sabe
cómo. No hay nadie
que haya visto cómo es realmente. Pero
a veces en habitaciones llenas parece
quedarse quieto y conocerte, levantarse
hacia ti. Da. No digas nada,
haz un movimiento en dirección contraria
(como ahuyentando a un gato callejero)
y desaparece.
De Situaciones (Situaties), De Arbeiderspers, 2006
Traducción española: Eva Navarro 2009
SOLVE ET COAGULA
Aquella vez que te sangraba la nariz recuerdas
aún, que no se cortaba,
tú en el lavabo, la cabeza inclinada,
“¿voy a vaciarme del todo?” y yo te veía allí sentado,
Era como si ya no me atreviese
a tocarte, o si tú te fueras
a diluir en la realidad como oro
en aguas regias, al haberte yo
apenas acariciado;
naturalmente no ibas a morir
aún, ya lo sabía, pero aquel que canta
para liebres y osos canciones en las que cuenta
como les ha disparado, acababa de empezar
a componer la tuya, yo podía
oírla en mi interior, ping,
pong, los primeros,
cautelosos tonos.
De: Una cama de carne humana (Een bed van mensvlees),
SOLVE ET COAGULA
Aquella vez que te sangraba la nariz recuerdas
aún, que no se cortaba,
tú en el lavabo, la cabeza inclinada,
“¿voy a vaciarme del todo?” y yo te veía allí sentado,
Era como si ya no me atreviese
a tocarte, o si tú te fueras
a diluir en la realidad como oro
en aguas regias, al haberte yo
apenas acariciado;
naturalmente no ibas a morir
aún, ya lo sabía, pero aquel que canta
para liebres y osos canciones en las que cuenta
como les ha disparado, acababa de empezar
a componer la tuya, yo podía
oírla en mi interior, ping,
pong, los primeros,
cautelosos tonos.
De: Una cama de carne humana (Een bed van mensvlees),
De Arbeiderspers, 2003.
Traducción española: Eva Navarro, 2009
PARAISOS DE LO COTIDIANO
Traducción española: Eva Navarro, 2009
PARAISOS DE LO COTIDIANO
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