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martes, 13 de marzo de 2012

6297.- MARÍA VILLAR BUCETA



María del Carmen Villar Buceta nace el 25 de abril de 1899 en Corral Falso de Macuriges, hoy municipio Pedro Betancourt, provincia de Matanzas. Su infancia transcurre en un ambiente muy difícil para alguien como ella quien desde muy temprana edad manifiesta inquietudes de carácter literario.
La pobreza imperante en el hogar y la incultura predominante en su pueblo natal frenaba sus ambiciones intelectuales. Cursó la enseñanza primaria y cuando apenas contaba con 11 años debió abandonar los estudios y asumir la crianza de sus hermanos menores y las labores propias del hogar al fallecer su madre.
A pesar del medio adverso en el cual se desarrollaba su existencia, María se convierte en una verdadera autodidacta. Su afán por la lectura le ofrece nuevos horizontes y se inicia en el cultivo de la poesía.
En 1916, el Diario de La Marina publica en La Habana su primer soneto titulado "Desilusión" que marca el inició de su original lirismo. Al aparecer sus primeros versos en revistas y periódicos habaneros, debido a la profundidad del contenido y madurez de estilo, muchos se negaron a creer que pudieran ser de una joven provinciana. Algunos dudaron de su real existencia y llegaron a atribuir sus versos al poeta jagüeyense Agustín Acosta. El propio Acosta se encargaría de aclarar estas interrogantes.
En 1921 se traslada a La Habana con su familia en busca de trabajo y mejoras económicas. Comienza a laborar en la redacción del Diario La Noche y es precisamente aquí donde publica su inmortal trabajo periodístico "El 24 de febrero y yo". Esto motiva la visita de Rubén Martínez Villena quien quiso conocerla personalmente, lo que finalizó en una entrañable amistad entre Rubén y María, quienes se convertirían en compañeros de lucha años más tarde durante la revolución de los años 30.
Su libro de poemas Unanimismo ve la luz en 1927 gracias al aporte de una amiga, Sarah Méndez Capote, quien le proporciona el dinero necesario para sufragar la publicación.
La poetisa establece relaciones de amistad con destacadas personalidades como: Laguado Jayme, Gaspar García Galló, Emilio Roig de Leuchsenring, Enrique José Varona y Fernando Ortiz. Por gestiones de estos tres últimos comienza a trabajar en la Biblioteca Nacional. Allí realizó una importante labor de catalogación de los fondos existentes que marcó pautas en el trabajo futuro de las bibliotecas en Cuba.
Instaurada la dictadura de Gerardo Machado, María es una de sus más fervientes opositoras. Participó en la distribución de proclamas contra el régimen, en manifestaciones y huelgas. A inicios de la década del 30 integra las filas del Primer Partido Comunista de Cuba. Adscrita al grupo Minorista formó parte también del grupo Gorki, primera filial Internacional de Escritores y Artistas Revolucionarios, siendo la única mujer en el mismo.
A la caída de Machado, enfrenta la reacción del ABC, es cesanteada de su puesto de trabajo en la Biblioteca Nacional. Pasa a laborar en la Biblioteca Municipal de La Habana. En 1934 escribe su ensayo bibliográfico Vida y Muerte de Rosa Luxemburgo. Dos años más tarde imparte en el Lyceum de La Habana el Primer Curso de Iniciación Biblioteconómica ofrecido en Cuba, con el cual sienta las bases de la organización científica de bibliotecas.
En 1938 labora en calidad de bibliotecaria en la Escuela Nocturna Popular del Cerro. Cinco años después retorna a la Biblioteca Nacional. Al fundarse en 1934 la Escuela Profesional de Periodismo, se traslada al centro para dirigir su biblioteca. Imparte ese año un curso de Biblioteconomía.
En 1944 edita una Contribución a la Bibliografía de Rafael María de Labra y aparecen en los periódicos esporádicos artículos suyos sobre diversos temas. A solicitud de la FEU, pronuncia en el año 1946 en el Aula Magna de la Universidad de La Habana su inolvidable conferencia "Evocación de Rubén Martínez Villena".
En la década de los 60 comenta varios libros en la Revista Política Internacional del MINREX, traduce el prólogo de la obra Ideología del Colonialismo, de Nelson Wrnecn Sodré, publica nota critica sobre textos del Congreso de los Estados Unidos acerca de la muerte de John F Kennedy, entrega en el órgano de prensa El Mundo artículos sobre temas artísticos o políticos y labora como responsable de la Biblioteca de Relaciones Exteriores. Se destaca en estos años las conferencias impartidas en el Capitolio Nacional el 7 de julio de 1960 sobre bibliotecología y la dictada el 3 de febrero de 1976 en la Sala del Centro de Documentación del Consejo Nacional de Cultura, titulada "El Doctor Emilio Roig de Leuchsenring como documentalista".
María Villar Buceta fallece en La Habana el 29 de junio de 1977. Dejó un poemario inédito titulado "Último tiempo".





Hermetismo


¡En casa todos vamos a morir de silencio!
Yo señalo el fenómeno; pero me diferencio
apenas del conjunto… ¡Tengo que ser lo mismo!
Dijérase que estamos enfermos de idiotismo
o que constituimos una familia muda…
de tal suerte en sí propio cada uno se escuda.
Como de nuestros otros nos sentimos avaros,
de nosotros la gente piensa: «son entes raros,
o egoístas, o sabe Dios qué…»
¡Tal vez dirán
que sólo nos preocupa la conquista del pan!
¡Yo en medio de todos, Señor, con mi lirismo!...
¡Cuán se agobia mi espíritu de vivir en sí mismo
y ver siempre estos rostros pensativos y huraños!
¡Y así pasan los días, los meses y los años!










SED DE VIDA


Es indudable, oh alma !, que quisimos
vivir la Vida muy de prisa: ese
fué nuestro error fundamental... Un loco
afán, una insaciable sed de vida,
turbó nuestra razón, y nos lanzamos
a conquistar la formidable cumbre
donde se asienta la Verdad que, absorta,
con una enorme turbación de nupcias,
se nos dió toda... Y la verdad fué nuestra !


Inaccesibles sobre nuestra cumbre
- tal un águila erguida sobre un risco –
las primicias del triunfo disfrutamos;
y ella, la huraña, fué como hembra pródiga
a la voracidad de nuestros besos…
Desde entonces, oh alma !... desde entonces
tuvimos los secretos de la Vida,
nuestra duda trocóse en certidumbre,
y nuestra certidumbre en desencanto:
a la tristeza de ignorarlo todo
siguió el dolor de la sabiduría !
Y fué nuestro dolor sin esperanza !


Quien nada espera nada cree; pero
Aprendimos la Ciencia de la Vida
En la desolación de nuestro triunfo !
Hemos llegado…! Hemos llegado ?...
Acaso hemos tergiversado nuestro oculto
Sentido de la Vida… En tu tristeza
ví la consumación del sacrificio
y tu impotencia ante lo irremediable…
Oh mariposa que en tu propio fuego
quemaste el polvo de oro de tus alas:
tú y yo sí comprendemos la tortura
de Prometeo atado a ingente roca !
Con nuestras manos, cual si fueran buitres,
Nos arrancamos todos nuestros sueños:
borramos todo inútil espejismo
que decorara nuestra perspectiva
interior; mas la cumbre nos dió en cambio
su facultad de dominarlo todo
y ver todas las cosas de la tierra
como a vista de pájaro…
Y ahora …!


Ahora iremos por todos los caminos
con nuestra fortaleza por escudo;
haremos florecer en cada yermo
una como ficción de primavera;
habra la floración de una sonrisa
comprensiva y piadosa en nuestros labios
para todos los débiles del alma
que quedan rezagados en su ruta;
y para aquellos que a nosotros lleguen
conscientes de su fuerza, les daremos
nuestras manos, en son de bienvenida !















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