BUSCAR POETAS (A LA IZQUIERDA):
[1] POR ORDEN ALFABÉTICO NOMBRE
[2] ARCHIVOS 1ª, 2ª, 3ª, 4ª, 5ª 6ª 7ª 8ª 9ª 10ª 11ª 12ª 13ª 14ª 15ª 16ª 17ª 18ª 19ª 20ª y 21ª BLOQUES
[3] POR PAÍSES (POETAS DE 178 PAÍSES)

SUGERENCIA: Buscar poetas antologados fácilmente:
Escribir en Google: "Nombre del poeta" + Fernando Sabido
Si está antologado, aparecerá en las primeras referencias de Google
________________________________

jueves, 2 de septiembre de 2010

1082.- FERNANDO ARRABAL


Biografía de Fernando Arrabal: Escritor y cineasta nacido en Melilla (España) el 11 de agosto de 1932. Reside en Francia desde 1955.
Aprendió a leer y a escribir en Ciudad Rodrigo (Salamanca), ganando el Premio Nacional de «superdotado» a los diez años y realizando sus estudios universitarios en Madrid.
Siendo niño sufrió la misteriosa desaparición de su padre, condenado a muerte y después fugado. A causa de este trauma, como escribió el premio Nobel Vicente Aleixandre, «el conocimiento que aporta Arrabal está teñido de una luz moral que está en la materia misma de su arte».
Ha dirigido siete largometrajes. Ha publicado trece novelas, ocho centenares de libros de poesía, varios textos para teatro y varios ensayos entre los que destacan sus libros sobre ajedrez. Sus novelas han sido traducidas a numerosos idiomas. Su Carta al General Franco tuvo especial repercusión publicada en vida del dictador. Figuró, a la muerte de Franco, en el grupo de los cinco españoles más peligrosos con Santiago Carrillo, Dolores Ibárruri La Pasionaria, Enrique Líster y Valentín González El Campesino. Su teatro completo, editado en los principales idiomas, ha sido publicado en dos volúmenes de más de dos mil páginas, en la Colección Clásicos Castellanos de Espasa en 1997, actualizada en 2009.
Con Alejandro Jodorowsky y Roland Topor fundó en 1963 el Grupo Pánico. Es Transcendant Satrape del Collège de 'Pataphysique desde 1990. Amigo de Andy Warhol y de Tristan Tzara, pasó tres años en el grupo surrealista de André Breton, por lo que Mel Gussow le considera el único superviviente de los «tres avatares de la modernidad».
En el 2010 Fernando Arrabal ha protagonizado el primer film de género Post-panico de la historia. El largometraje Regression ha sido creado y dirigido por Joan Frank Charansonnet Desde el año 2002, Arrabal y Charansonnet han colaborado mutuamente en diversos proyectos artísticos como la Carta de Amor (Teatro Hermitage de Moscú) o la reposición oficial del Arquitecto y el Emperador de Asiria cuarenta años después de su estreno. (Fernando Arrabal recibió el Premio Max Honorifico)

Obra poética:
Entre sus libros se incluyen:
1963 La pierre de la folie (La piedra de la locura)
1985 Humbles paradis (Mis humildes paraísos)
1993 Liberté couleur de femme ou Adieu Babylone, poema cinematográfico (Ed. Rougerie, Mortemart)
1997 Lettres à Julius Baltazar (Ed. Rougerie, Mortemart)
1997 Diez poemas pánicos y un cuento (Amphora Nova)



SONETO DE ODIO Y AMOR A ESPAÑA, I

Te recuerdo cruel y misteriosa
me alboroto pensando en tus mamones
la más guapa de todas las naciones
eres bella y con ojos de viciosa.

Al pegarme te vuelves más hermosa
con tus azotes y tus mojicones,
rompiéndome la crisma a bofetones
mi niñez la forjaste dolorosa.

Si en tus labios acerté con tanto tino
en tus cejas mi pubis se alojaba.
En el sur de tu piel me desatino

distribuyes tus besos con la lava,
representas belleza en batería
¡ay que patria tan causa de manía!



SONETO DE ODIO Y AMOR A ESPAÑA, II

Cabeza de mujer y pies de arcilla
soñadora encerrada en caracola
madre de utopías; banderola
derrumbada y cruel en mi boardilla.

Cual menina de carne en una silla
abandonada a su suerte de amapola
a mi tierra le digo sin pistola
"orgulloso me siento de mi orilla".

Coso digno de envidias para algunos
o de olvido, o de odio, o de deseo
reposado en su horror tan aceituno

le levanto la historia y le entreveo.
Tras decenios de fuga y pesadilla
hoy, España, te beso en la mejilla.






TESOROS DE LA ESPAÑA DE HOY

Collage de F. Arrabal

En la España del cajero
poderoso Caballero
es Don Dinero.

Banca, yo al dólar me humillo
él es mi amante y mi amado
pues de puro enamorado
de continuo ando verdillo
pues el cheque, dando brillo,
hace todo cuanto quiero.

Poderoso Caballero
es Don Dinero.

Oigo Patria tu follón
y escucho el rico concierto
que cantan de Bolsa a puerto
las pesetas y el zurrón.

Miré los muros de la Patria mía
si un tiempo fuertes ya desmoronados
de la carrera del caudal cansados
por quien reluce ya su roñería.

Doquiera la mente mía
sus alas rápida lleva
allí un buen Banco se eleva
loando tu fiscalía

Poderoso Caballero
es Don Dinero.

Los invisibles átomos del aire
en derredor palpitan y se inflaman
el cielo se deshace en rayos de oro
España se estremece alborozada.
Oigo flotando en olas de armonía
rumor de besos y batir de alas
mis párpados se cierran... ¿Qué sucede?...
Repta ya la SERPIENTE MONETARIA.

En la España del cajero
poderoso Caballero
es Don Dinero.





Poesias y lienzos de Fernando Arrabal




IV


¡Con qué jubilosa exactitud el color,
celoso de la forma,
concibió los matices
en las alas
de la libélula!
¡Con qué fulgores precisos
la armonía
puso colofón
al destello irisado de su gama!
¡Con qué reverencia justa los afectos
variaron los tonos
para una belleza
más sentida que creada!
¡Con qué regalo infinito
los infinitos colores
dejan de ser hermosos
para aparecer sublimes!


VII

Parecióle a la belleza
museo estrecho la tierra;
buscó en el aire,
y en los confines del primor y la armonía
encontró a la mariposa vanesa
¡Qué misterios se esconden
tras sus murallas de púrpura!
Tanto prodigio con tanta concordia,
tanta variedad con tanta permanencia,
que su mesura no se explica
descomponiendo sus elementos.
Pompa de la inefable gracia,
consecuencia de los atributos sutiles
que nada puede enmendar
un átomo de su hermosura.
Sus alas vestidas de ceniza
se revisten del esplendor
de su purísimo manto
tan sin freno de fineza
como picado de excelencia.
Empeñada en el descubrimiento
palabras me faltan
donde devoción me sobra.


VIII

¡Mira con qué donosura
entran cien pies
en la existencia!
Es vagabundo el ciempiés
que no cuenta su camino
por zancadas,
sino por desfiles,
Para un solo paso
¡qué afán tan concurrido!
No tiemblan tanto sus patas de torpeza
cuanto de recato.

Su cuerpo fajado de rodillas la divagación hospeda.
Saboreando el zanganeo su corazón
no sabe si la corazonada le guía o la costumbre
le lleva. Contemplando sus pies tan reducidos
sueña con caminos infinitos. Pide al tiempo le permita
un tiempo el que desea una eternidad de merodeo.


XXII

El escarabajo supone un creador
conquistador de exactitudes
pero rendido a la medida.
Grande es el adorno de su caparazón,
mayor el de su destino,
ayer larva, anteayer huevo,
hoy caminante coprófago.
¡Cuanto apetito siente!
¡Con qué gusto, de excrementos se ceba!
Desmenuzados sábenle mejor,
porque nada es todo.
Ahondo en la esencia sin recelo,
con celos lo contemplo
y se enciende mi celo
ante un banquete de heces.
Cada manjar eternidad merece.
Convidada a un ágape único
donde el que convida inconsciente
es convite del convidado.
Al favor de mirar corresponde
el fervor de admirar.


XXXIV

Estampa barnizada
que reducida a redondez de laca
reproduce el firmamento inmenso.
Con prodigio pródigo el artista
regala, uno a uno, meteoritos
pintados a cada mariposa.
Con qué gozosa felicidad ahondo
en la esencia de la obra,
experimentando el diminuto deleite
y sacando los inolvidables contentos.
Sus alas plegadas en el cerrado
escenario convexo
revelarán la función.
Cuando la estampa se hiende en dos mitades
los bordados negros y las alas aparecen,
la mariposa hace mutis.
¡Con qué conato se abalanza al cielo!


XXXV

El hondo sentimiento
da el diminuto resplandor
a la luciérnaga.
La noche vestida de penumbra
se reviste de centellas.
El lúcido reclamo
encubre la obscuridad
y esconde lo incierto de la sombra.
Avivada la luz
se despierta el ansia
crece el estremecimiento
al paso de la gana.
Alumbrando y desalumbrando el apagón
a medida que su corazón se enciende
iluminado de amor.
El candil de la encandilada
parpadea en las tinieblas,
sutileza pronta,
chispa de ingenio.
¡Habrá luces mientras haya luciérnagas
en celo!

Del poemario "Mis humildes paraísos",
Ediciones Destino, Barcelona, 1985.






Clítoris

Ventana de la mar para la tempestad y sus olas
Sol de la almendra para el dardo y sus trompetas
Luna del crepúsculo para lo lascivo y sus caprichos
Carne del impudor para el deseo y sus tumultos
Concubina del pubis para el macho y sus males
Pimentero de la fusión para la alcoba y sus tigresas
Armonía de la verticalidad para el carnívoro
y sus chupetones
Estampilla de lefa para el creador
y sus alucinaciones
Joya del orgasmo para flauta y sus dedos
Pleno de existencia para la intimidad y sus ritos
Taller del amor para el martirio y sus brasas
Corazón del espasmo para la eyaculación
y la lamida
Flor del furor para el sádico y sus mordiscos
Molino de delicias para la pistola y sus tiros
Margarita de Eros para el libidinoso y sus fervores
Nicho de enigma para la penetración y sus rayos
Ciprina de adoración para el tallo y sus carnavales
Botón de ligue para el priapo y sus caprichos
Rosa de besos para el adorador y sus puros
Calibistri de locura para el bullicio y sus dilecciones
Concha de seducción para lo precioso
y sus himeneos
Escudo de delirio para el ruiseñor y sus caprichos.
Copete de ardor para la fantasía y sus nudos
Mandolina de calor para la flecha y sus intrigas
Fresa de diluvio para el delirium y sus tremens
Nido de culto para el marqués y sus ataduras
Cajón de erección para el clavicordio y sus pasiones
Mechón de embrujo para la daga y sus toques.
Tesoro de fiebre para el falo y sus quemaduras
Cetro de la llama para la ceremonia
y sus frenesíes.

Arrabal (Monte Carmelo, 2007)






Por Razones de Seguridad

Por razones de seguridad subo de puntillas
las escaleras del cadalso,
Y saludo cortésmente a los perros alucinados
de las alquerías lunares
Observo como transitan los ciervos heridos
esquinas de Central Park,
Y meo atentamente en las manos
de las prostitutas
perdidas en la lluvia de los taxis.
Un son rezumante anula
los cánticos noctámbulos
del lujo de los grillos al amanecer.
Y sé del sermón del monte en la barahúnda
de las tabernas por razones de seguridad.
(...)

Por razones de seguridad ausento
mis huesos
de Leda de la eternidad sin hamacas ni lianas
Y seco la piel de argón en los intestinos
disecados por el nadir un instante
en el estío del Hades.
Cincelo el abstracto con mis manos arrugadas,
cartón tribal, cimbreado a sabiendas del hilo
De los durmientes que en sueños entrelazan
de efímeras yedras líquidos cuellos roturados.
Espontáneas sombras pliegan las velas
igual que barcos
afortunados donde el timón es arracimada gula,
Tripula mi querido y viejo marino ciego
la nao de los locos, glande oxigenado,
y por razones
de seguridad
Omito la descabellada idea de pasear
silbando en bicicleta
el abstracto colectivo hurtado de Dioses,
La linfa llena de cielos vacíos y termiteros
de barómetros en ojos puros manchados
de azules,
Por razones de seguridad pregunto
almohada de Bella Durmiente
por los ojos abiertos
DE las calaveras emocionantes,
yacidas al pié de colina Asís,
actual Wall Street
Poesía de uno de los locos genios de hoy en día.
Periódicamente se actualizarán y ampliarán
estos conocimientos.

No hay comentarios: