2172.- NICOLAS BEHNCKE

Nicolas Behncke. (Estados Unidos).
Nicolas Behncke, nació en Nueva York el 1 de febrero de 1986. Creció en la provincia argentina de Mandoza. Regresó a Nueva York en abril de 1999. Actualmente, cursa el segundo año universitario en Bergen Community Collage.




Pozo


Imágenes profundas
de un lugar secreto,
profundo secreto revelado
de una imagen perdida,
perdida en el tiempo profundo

de los secretos

y las imágenes temporales,
temporal como esta lluvia

que me trae recuerdos
desde los más profundo de las imágenes

y me susurra secretos al oído,
oído que escucha los secretos
de un desconocido temporal,
que con fotos me enseña una imagen perdida

en lo profundo de un tiempo subreal….






Lo que a nadie le falta

Todos tenemos un don
un salpicón de inspiración
algo que entregar a un mundo opaco
algo que enseñar
algo que innovar
algo de artista, algo de soñador.

Todos tenemos un niño adentro
que nos mantiene virgen
nos regala dulzura
que nos da ganas de cometer
mil quinientas travesuras
nos entrega pureza en vez de tristeza
que no nos pide visa
a la hora de repartir sonrisa
que nos declara la guerra
cuando el aprendizaje

ya no forma parte de este viaje.

Todos tenemos una canción
una mezcla de sonidos innatos
un arrullo a la hora de dormir
que nos suelta el llanto
que nos dibuja recuerdos
que me devuelve tu aroma
que hace despegar las alas
para volar por la vida y sus trabas
que me refugia en el cono sur de tu cuerpo

para que tus manos me palpen

y así me de cuenta que estas viva.


Todos tenemos un instante de cansancio
de aburrimiento como alimento
de odio hacia la rutina
de rencor contra la injusticia.

Todos tenemos una sensación de soledad

a la hora de amar.








Soldadito de plástico

Prisionero de guerra
soldadito de plástico,
con tu fusil cargado
de amor por la patria
de odio por tu hermano.


Si es musulmán
es el blanco perfecto
a disparar.

Es un asesino de la libertad,
terrorista que lucha
contra el terror que le bombardeen
su hogar en Baghdad.

Es un sin Dios
que ama la guerra,
por eso da batalla
cuando tu ejército,
soldadito de plástico,
a matarlo va
con la libertad como pantalla.

Si cree en el Corán
¡¿qué más da?!
que se repitan las cruzadas
que se escuche la ley del fusil
deléitanos con la música de tu misil,
que se manche de rojo
el plateado de tu sable,
que se maten niños, asesinos del futuro,

que se maten ancianos para que
después no digan que de ellos te has olvidado.

Prisionero de guerra
soldadito de plástico,
con tu fusil cargado
de amor por la patria
de odio por tu hermano.

Si es latino
es un tremendo cretino
que no respeta costumbres impuestas
¡es un ladrón de los trabajos
mejor pagos!

Y cuando
en busca de un sueño estrellado

entre barras cruza el río, muertas

en el cepo quedan sus ilusiones

y ahíto el ranchero, con tanta emoción.

Alcohólico melancólico
que su terruño deja
obcecado por promesas de un mejor futuro

que tras doce horas de trabajo
diario frustrado de cansancio

no lo puede salir a buscar.

Es mejor mantenerlo ignorante
que no tenga ideas,
que de la realidad esté distante,
y así se convierta
en otro soldadito de plástico.